viernes, 2 de julio de 2010

No busques más. Estate quieto para que el Amor te encuentre a ti...


Cásate contigo mismo.

Comprométete contigo, únete a tu ser. Se fiel a ti mismo…
No busques más. Estate quieto para que el Amor te encuentre a ti.
El Amor... hace tiempo que te busca. Si tu alma está quieta, te encontrará.
Cuando estés sin expectativas, sentirás esa gran fuerza.


El amor y el tiempo tienen un curioso y fuerte vínculo.
Veréis… vosotros, los seres de luz encarnados ahora como humanos, tenéis el tiempo limitado.
Es parte inherente de vuestro ser: el precioso tiempo que tenéis.
Esa es vuestra condición humana.
Fuera de la experiencia en la Tierra, sois eternos, ilimitados, infinitos.


Pero aquí, encarnados en un cuerpo, tenéis ese tesoro: el tiempo parcial y acotado de realizar un proyecto, o un trayecto, o un proceso, o un aprendizaje, o una maestría…
Es el plazo que os disteis para hacer algo concreto.
El tiempo es vuestro aliado y a la vez es vuestro impulsor y vuestro desafío.
Cuando dedicáis tiempo a alguien… ese es el regalo más precioso que le podéis dar.


Ese tiempo vuestro que le dais a otro, es irrecuperable, porque es un trozo de vuestra Vida.


Eso es el Amor…
Eso tan sencillo, dar vuestro tiempo, también es el cristo fundamental en todos nosotros.


Maria Magdalena